lunes, 30 de agosto de 2010

Qué lunes tan insípido

"The last advance
One final chance
It now shall be:
No Guts, No Glory!"
No Guts, No Glory de Bolt Thrower

Hoy fue un lunes que no supo a lunes. Quizás fue el hecho de que llevo haciendo el servicio social del evento en cuestión desde el domingo y mi organismo está descompensado creyendo que hoy es martes... o bueno, la hora indica que hoy es martes, pero para mí sería miércoles... o pues, ustedes me entienden.

Simplemente el domingo fue lunes para mí... pero no es lo mismo. El domingo temprano ves alrededor las caras de la gente y sabes qué están pensando: "¿Qué chingados hago levantado a esta hora en domingo?" Y es que ni la chamba sabe en este día creado para el descanso según algunas religiones y sindicatos... pero ahí vamos... a la feria del libro en Álvaro Obregón.

Último jalón del servicio social. Última semana en la que puedo ser semi libre y tener excusa para no seguir con mi vida, una especie de limbo que empecé en marzo de este año... y que ahora, está a punto de culminar y volverme un nini (Según la nueva corriente, significa que son jóvenes de 18 a 24 años (yeah, aún soy joven) que ni estudian ni chambean. También tenemos a los nininis que son los que ni estudian, ni trabajan, ni son jóvenes). Pero espero que el as (ni tan as) que tengo bajo la manga funcione.

En otras noticias, sigo anonadado por el encabezado que leí hoy en un periódico mientras viajaba en pesero. Decía así: "Se vuela la tapa de los sesos por jugar ruleta rusa." A pesar de que al principio me parecía redundante, era demasiado para llegar a estar en el periódico. Sé que publican a los ganadores de la lotería nacional y que había una sección de epitafios, pero no sabía que podían publicar al ganador de la ruleta rusa... dos pájaros de un tiro supongo.

Pos a aguantarle... será una semana que dure una quincena, pero ya es el último jalón...

A gozar la morsa.

sábado, 28 de agosto de 2010

Cambio a la no tan Feng Shui

Pues ahora sí no tengo una cita musical que me venga a la cabeza para empezar esta entrada, pero seamos sinceros, ni les importa, tons como yo soy el jefe y autor de este pseudo blog, puedo hacer lo que quiera.

Pero bueno, pasemos al por qué de este pequeño escrito ciberespacial.

No sé que tengan los meses sin intereses (quizás hay meses menos interesantes que otros) que vuelve loca a la gente. O quizás no loca, pero si contemplativa en su capacidad de gasto para ver si pueden comprar ese algo que quieren, pero que de otra manera no podrían obtener.

Hace unas cuantas semanas gané mi primer sueldo grande freelanceando una revista que en estos momentos padece de incertidumbre. Si continuará o no está en manos de la SEP, pues era su proyecto para empezar. De todos modos se me pagó los primeros 2 números y yo recontento agarré y ahorré una lana para mi tele. Hoy en día hay ciertos aparatos que exigen y demandan una tele de esas de alta definición (que la tele y la programación, de todos modos no se ve en alta definición...) para ver los juegos de la nueva generación, hasta las pecas a los personajes. Así que ahorré un porcentaje y lo demás fue para comprarme cosillas (aún no llega mi set de discos de Artillery... -_-') e invitar a Nay a echar la pizza.

Total, ya le debo un poco a mi papá por impuestos (me prestó su recibo de honorarios) y todo iba bien, incluso con ese 10% de ISR. Hasta que la batería del Peyote murió derepente... ni modo. Como las cosas no van de lo mejor, pues yo decidí invertirle al carrito y poner de mi lana para comprar la batería. Vientos, hasta se sintió bien no ser el gorrón mantenido de siempre y cooperar con un gasto inesperado, pero eso redujo mi presupuesto televisivo.

De la nada llegan las ofertas de 18 meses sin intereses. No sé si a mi mamá le remordió un poquito la conciencia por mi puesta monetaria al carrito, pero me convenció de ir a checar las teles y ver qué onda... digo, estaban a 18 meses.

Sin hacerles el cuento más largo, ya tengo telera nueva. Yo la pagaré, pero pues ahí ya está para estrenarse.

Aún así, ese no fue el único cambió que ocurrió. Aaaaaahhhh, no. Ahora ya instalada la tele, mi madre tan linda, me dijo que ya encarrerado el ratón, pues a mover la compu pa aca y ciertos muebles, por lo que mi cuarto sufrió una especie de 'make over' donde moví, tiré cosas, me deshice de otras, me tope con algunos recuerdos por ahí... y ahora les ando escribiendo desde mi cuarto.

Por desgracia, yo tengo la mala, pésima, horrorífica costumbre de acumular porquería y media. Entonces, como eso a mi mamá no le late, pues a tirar cosas (creo que por ahí se fueron algunos papeles del servicio) y aún no acabo. Me tomará algunos días encontrar espacio para todo mi tinglado acumulado, y lo más importante, ver dónde pongo todos mis discos. Cuando uno los compra, no hace mucho para acomodarlos... hasta que nos damos cuenta de cuántos son... joder.

Ni modo... a ver cómo queda. Que Feng Shui ni que nada.

jueves, 26 de agosto de 2010

Es jueves y casi fin

"You've got to live for the moment,
you've got to go for the throat!
You're given only one chance,
and you know that life's too short..."
Hero's Soul - Metal Church

Hoy es uno de esos días en los que uno no se quiere levantar, pero de ni casualidad. Cuesta trabajo levantarse y hay ciertos temores y horrores que nos acechan durante el día, peor que una caverna llena de trolls hambrientos y calientes. Pero hay que levantarnos, y apretar duro las nalgas, pues es el único método de aguantar el día y salir de la cama.

Con un regaderazo semi rápido, salí de volada a imprimir un par de cosas que había investigado para lo de la tesis. No quería ir a la papelería de la esquina, pues me cobran el uso de la computadora aparte del de la impresión. Hoy fue distinto; sólo fue la impresión. Tenía la seguridad de que quizás hoy me iría bien. Hoy era un buen día para brillar... pues ya iba mentalizándome a este rollo de pedir un ligero aumento de mis colaboraciones.

Avancé poco camino a la escuela. Un camión de gas, buscando de manera atrabancada estacionarse, golpeó fuertemente la banqueta con la llanta de atrás provocando que ésta se reventara. Eso no se ve todos los días; una llanta revienta, la gente sale a ver qué pasó, el señor que iba al lado casi le da el patatús, y yo en la lela fui devuelto a la realidad mediante un ligero y fuerte golpe de un pedazo de neumático que me golpeó el dedo (hasta me abrió...). Rayos, se me olvidaba que lo que explote, esparce todos sus pedazos por los aires... espero nunca morir bajo el yugo de una explosión... no me gustaría ver a la gente bañada en mis intestinos y vísceras. Aunque ya ni me tocaría verlo... mis ojos volarían de todos modos.

Llegué a la escuela y mi asesor andaba ocupado. Me vio y me pidió unos 20 minutos de mi tiempo. No hay bronca, no tengo nada más que hacer hoy y 20 minutos es tiempo suficiente para terminar de escuchar a Maiden.

Pasó una hora y pude ver lo de mi tesis con él... esperé una hora para tener una conversación de 15 minutos. Tampoco llevaba suficiente material, pero bueno... algunas esperas duelen.

Había llegado el momento de la verdad: Ir a agarrarme las bolas e ir a pedir un leve aumento para mis colaboraciones. Creé una lista de canciones motivadoras y le puse play. 'No Guts, No Glory' de Bolt Thrower abrió la lista y con la frente en alto, la mirada serena y las bolas bien apretadas me lancé hacia mi destino.

Sin más que decir, no me lo dieron. Ni modo. No hay peor lucha que la que no se hace e intentar no cuesta nada. Es mejor tener la satisfacción de haberse alejado de la zona de confort y haber pedido algo sin haberlo obtenido. Para mí, eso es una victoria sin recompensa, pero una victoria que no me sabe a cerveza.

Me lancé al Oxxo y compré un Muffin con chispas de chocolate... soy adicto a esos muffins, pues están bien buenos. Mientras lo devoraba con mirada lujuriosa y paladar bien abierto, me preguntaba si quizás esta batalla hubiera ido mejor si hubiera abierto la conversación con un chiste de Polo Polo...

miércoles, 25 de agosto de 2010

Lo que cae del cielo...

"Opportunity came to my door
when I thought I might need a ride
but I said I'm doing alright
turn around and start to see

Yeah, life is boring- Monday,Tuesday
The machines are roaring-Wednesday,Thursday
Friday, and the rain keeps falling
just like everyday"
Opportunity - Gamma Ray

Una cosa es cierta: No todo lo que cae inesperadamente del cielo literal o metafórico es bueno. Cada vez que me cae una cagada de pájaro en la tatema o en cualquier sagrada playera metalera (por ser negras se nota más) evito hacer corajes y patear el piso (más que nada por el bienestar de mis paturcias) y pienso que debe ser de buena suerte.

¿Por qué sería de buena suerte? De cierta manera no siempre nos cagan encima, es decir, si el karma existe, ese pequeño desperfecto debe ser compensado por uno bueno; pero si también el karma existe en el mundo animal... no me imagino que tamaño de cagada les debe caer a los pobres pajaritos. Aparte, siempre está el dicho: "Podría ser peor." Así es... las vacas ya pudieron haber mutado y haber crecido alas... y señoras y señores, lectores de esta entrada... una cagada de una vaca a esa altura, ya hubiera dejado varios descalabrados y encabezados del Metro en cuestión de segundos. Por lo que creo que es mejor un pájaro a una vaca voladora. (O la resurreción de algún Pterodáctilo)

A veces la no espera es mejor que la espera. Lo que derepente cae sin aviso alguno es más fácil de lidiar que lo que ya venimos anticipando. Se crea una expectativa (buena o mala) de algo que puede o puede que no sea llenada por completo. Durante un tiempo pensamos en ello, en lo mal o bien que nos va a ir para que el resultado final quizás ni si quiera pase lo que creíamos. Pero de mientras ya quedamos ilusionados o sufrimos durante un rato con sólo pensarlo.

Mañana pediré el primer aumento de toda mi vida. ¿Cómo chingados lo pediré? No lo sé... nunca lo había hecho. Una parte de mi se prepara para el rechazo y la otra, para abrazar el pequeño aumento que puedo recibir. De mientras ya inventé como 30 inicios 'rompe hielo' en los que no se encuentra ningún chiste de Polo Polo, pero que quizás funcionen. Si el jefe llegara y me dijera que me lo da sin siquiera haberlo pedido, otro gallo cantaría. Lidiaría con la felicidad de lo no planeado; lo espontaneo y me ahorraría aprenderme los chistes animados de YouTube. A ver cómo me va... pongan changuitos.

Por el otro lado, la chamba siempre me ha llegado de sorpresa: 'Oye, necesitamos a alguien que...' Órale, yo lo hago. '¿Podrías hacer...? Oye, oye... cine y cena primero y está en veremos.

Así me llegó la chamba como colaborador en Tiempo Libre hace 6 ó 7 años, y así terminé haciendo publicidad a Crepúsculo hace 2 y cacho, creando un perfil de 'Edward' en Hi5. Una chamba que tampoco pedí, pero hice. El proyecto en el que participé por un par de números también cayó de la nada, y ahora se encuentra en standby, pero recibí una lanita aparte.

Para el siguiente número tenía que entrevistar a alguien de radio y lo primero que hice fue preguntarle a mi mamá si tenía algún conocido por ahí. De hecho lo tiene, y aunque lo borré de Facebook hace tiempo (no sabía quién chingados era), al parecer es la persona que me podrá hablar de la radio una vez que el proyecto se encarrile de nuevo. Curiosamente, es ese mismo ente el que puede ser mi conecte para una primer chamba de tiempo completo, así sin más, en radio. Mejor que muchas opciones que tenía contempladas... y de ahí a ver pa dónde me movería.

Es hora de agarrarse los huevos y decir que lo haré. Mandar a la verga a la postergación; ser proactivo como por segunda vez en mi vida y comenzar a agarrar la vida por los cuernos... digo, ¿qué tan malo puede ser?

martes, 24 de agosto de 2010

Como Cuento de Hadas

Habrá que darle un poco de rienda suelta a la tatema y explayarme un poco, ya que para eso creé este pedazo de espacio virtual, y no para contemplar el horrendo fondo que espero lograr cambiar en algún punto... na más vea bien cómo está el pedo en esta madre...

Hoy en algún punto del día me sentí como si estuviera metido en algún cuento para chamacos; uno de esos donde las verduras secuestran por algún motivo a la piña y sus amigas frutas piensan rescatarlas. Durante una pequeña junta para la organización de una feria del libro en Álvaro Obregón, escuché que el color azul estaba prohibido en la delegación.

Y así, en un reino dentro de la urbe defeña, había un lugar donde el color azul estaba prohibido. Caput, adiós, aquí no te veremos. Y aunque me imaginé todo un reino sin color azul, esa pequeña frase no se refería a que todo aquel que ose traer vestimenta, un carro, una bicicleta o lo que sea en este color, será balaceado por los demás colores sin tregua ni piedad. Por más divertido que fuera una guerra de colores, este no era el por qué del asunto.

Política. Hasta la política abarca los pinches colores que uno usa. Y es que el cartel que usamos para hacer notar el programa de fomento a la lectura, tiene azul. Y eso no puede ser... ahora a cambiar por el momento los colores a rosa y amarillo por cuestiones políticas... no vaya a ser que un libro color azul o una ciudad al fondo de ese color represente libremente al panismo... Pffffffffffffffffffft.

Hasta cierto punto lo entiendo... y me parece absurdo. Es una extraña paranoia de que el color azul atraerá a fieles bolillences a reclamar lo que es suyo mientras entes hechos a 'la simpson' buscan respaldar sus ideologías diciendo lo que ellos han hecho bajo un reinado libre del color azul.

Menos mal que los pitufos no viven en esta ciudad... quizás esos satánicos entes pequeños terminarían asociados con un partido político, cuando en realidad son del Ku Klux Klan...

*BUUUUUUUUUUURP*

Y con esto comienzo otro blog. Sí, así es... otro blog. ¿Será que no tengo nada más interesante que hacer que abrir blogs? Seamos sinceros, mientras la economía nos obliga a no reproducirnos como conejos por miedo a que nuestros hijos tengan que recurrir en algún momento al canibalismo, pues algo se debe reproducir como dicho animal... los blogs.

Ni pago por mantenerlos, ni crecerán y me abandonarán. Podré ser el padre irresponsable de estos pequeños hijos virtuales sin una mujer que me ande reclamando y podré jugar con ellos cuando quiera. Básicamente es como un Tamagotchi, pero sin ser tan mono ni tan tierno... ¡NI TAN DEMANDANTE!

Así creo este pequeño escuincle parido de las profundidades del blogger. Querido visitante, si tu naufragio virtual te hizo venir a parar en este espacio, te invito a que te rasques la panza, quizás leas un poco y eructes como si estuvieras en casa. Sin pedos, ni compromisos.